No tengo lo que quiero, por tanto, no soy feliz. Y creédme, deseo serlo, porque creo que me lo merezco. Es grato saber que la persona que quieres, la que te da y quita las sonrisas, la que determina tu estado de ánimo, la persona más importante de tu vida, sí que es feliz. Éso me hace sonreír, aunque su felicidad no se la proporcione yo.
Ante todo, la quiero, la amo... ¿qué se yo? Tengo 18 años y me he enamorado dos veces en mi vida, una salió mal... pero al menos la hice feliz y podía abrazarla, intentaba demostrárselo, pero, ¿y la segunda?... Ni yo sé la respuesta, pero es ahora cuando la necesito.
Hoy, estoy escribiendo a modo de diario. Expreso mis sentimientos por si a alguien le interesan, por si alguien no me conoce aún.
Me llamo Jorge Blázquez Ferrón, como ya he escrito, tengo 18 años; he vivido por y para el baloncesto, era buen jugador... pero era, es un verbo en pasado. El baloncesto, como todo lo importante en mi vida, ha desaparecido, debido a las lesiones, a mis tobillos de cristal, a mis ganas de jugar incluso cuando no debía. Lo he perdido, y la he perdido, no del todo, pero no es lo mismo.
En eso se resumen 16 de mis 18 años de vida, en el baloncesto. Lo he perdido, y si estás leyendo esto y te importo, es ahora cuando TE NECESITO.
